Hablar otro idioma es sin duda una aptitud fundamental para ampliar nuestras oportunidades laborales. De acuerdo con PageGroup, el 70% de las empresas en México solicitan a su personal conocimientos de inglés que van desde un nivel básico hasta avanzando según la posición a ocupar y otras profesiones relacionadas con ciencias, artes o tecnología, incluso podrían requerir el dominio de otro idioma como francés o alemán.
El aprendizaje de otra lengua no es una característica que se logre de la noche a la mañana y aunque lo ideal sería comenzar desde la niñez, hay muchas opciones para aprenderlo cuando somos adolescentes o adultos. La oferta de cursos es muy extensa y por ello los expertos en turismo educativo de Live and Learn comparten algunas recomendaciones para elegir dónde estudiar un idioma según determinada profesión.
El inglés es el idioma de negocios por excelencia, ofrece en automático una ventaja competitiva sea cual sea la carrera en cuestión. Para los mexicanos, Canadá (con un 70%) y Reino Unido (con 20%) son las opciones más demandadas para estudiarlo, el primer destino debido a su cercanía con nuestro país y el segundo dado que ofrece cursos especializados en perfeccionar ciertas áreas profesionales como leyes, medicina y negocios.
Para las ingenierías, el alemán es el idioma con mayor demanda. Alemania es uno de los países más industrializados del mundo y este grado de especialización hace que muchas publicaciones académicas estén escritas en este idioma; al igual que vacantes laborales.
Los últimos avances en tendencias de diseño, cultura cinematográfica y artes plásticas validan al francés como el idioma indispensable para carreras de arte y comunicación. Los destinos por excelencia para aprender y/o perfeccionar este idioma son Francia y Canadá.
Maru Fernández, Gerente de Productos de Educación Superior de Live and Learn, especialistas en turismo educativo, comenta al respecto: “actualmente la oferta para estudiar un idioma es muy vasta, sin embargo, la gran ventaja de hacerlo en el extranjero es que resulta mucho más productivo que estudiarlo en el país natal, ya que en un periodo menor de tiempo se pueden lograr avances considerables al estar inmersos completamente en otra cultura y que de esta forma el aprendizaje del idioma no se limite al salón de clases”.
Otra gran ventaja es la posibilidad de trabajar mientras estudiamos y así percibir un ingreso que nos ayude a solventar los gastos en esta etapa. Australia e Irlanda son dos países que cuentan con amplias facilidades para que todos los estudiantes extranjeros puedan trabajar mientras cursan algún programa en sus escuelas. El único requisito que se pide es cumplir un mínimo de semanas estudiando, en Australia son 12 y en Irlanda 26.
Acerca del tiempo recomendado para que un curso de idiomas en el extranjero, Maru Fernández, vocera de Live and Learn afirma que lo ideal es un lapso de tres meses para que la experiencia sea satisfactoria y se garantice una mejora considerable en el idioma.