Tres ediciones de FICUNAM han significado para el cinéfilo capitalino el goce de unas 400 películas, en su mayoría trascendentales en el discurrir del cine mundial y mexicano. Contextualizadas con presencia de realizadores invitados y clases magistrales, publicaciones, eventos de formación y acompañamiento para críticos, así como de talleres que proponen un acercamiento lúdico al quehacer cinematográfico, toda esta amplia oferta de películas evoluciona en cúmulos curatoriales dirigidos hacia el objetivo cardinal del festival: robustecer el mercado de cine especializado en México, alimentar la cinefilia cambiante y formar públicos afines en otros estados de la república.
Con la intensión de brindar contenido inédito, FICUNAM se apresta a su 4ª edición, consolidado como una de las plataformas más ricas en México para la apreciación en salas de cine. Prevalece en la programación el cine contemporáneo, mexicano e internacional, de corte radical y discursivo, propositivo estéticamente, no pocas veces en franco diálogo con la historia, un cine de entretenimiento creativo, en todo caso.
Los retos de este año son los peldaños que llevarán a la quinta edición. El deseo por ver cubiertas las expectativas del público en esta 4ª edición, está más que encendido.