Happink, la empresa especializada en la distribución de consumibles para impresoras, fotocopiadoras y faxes, acaba de incorporar un nuevo servicio de reparación de ordenadores portátiles y teléfonos móviles.
Mediante este soporte, los clientes podrán arreglar sus dispositivos a través del servicio técnico que ha establecido la compañía en sus tiendas, para lo cual ha formado específicamente a su personal.
Esta iniciativa supone un paso más en el desarrollo empresarial de Happink, que surge para dar respuesta a la creciente demanda por parte de los usuarios.
Así, la marca ofrece un valor añadido a su oferta inicial a través de la que distribuye más de 4.000 referencias de cartuchos, toner, recargas de tinta, papeles y accesorios para la impresión.
Los productos de Happink se diferencian por proporcionar un ahorro de hasta el 80% sobre los consumibles originales. Antes de su comercialización los artículos pasan por varios procesos de calidad, que garantizan además el respeto con el medio ambiente.
La empresa opera en un mercado que se encuentra en plena expansión, con un alto incremento en el consumo de cartuchos, toners y papel. Esta tendencia viene marcada por el escenario económico, que ha impulsado a empresas y a particulares a realizar sus propias impresiones en detrimento de la contratación de imprentas profesionales.
En base a estos indicadores Happink ha establecido un plan de expansión bajo el sistema de franquicias, a través del que espera abrir 20 establecimientos en nuestro país a lo largo del presenta ejercicio.
La inversión para poner en funcionamiento una franquicia Happink gira en torno a 15.000 euros en locales con un mínimo de 20 metros cuadrados ubicados en poblaciones con más de 10.000 habitantes.