El comercio en México sigue cambiando y adaptándose a los gustos de los consumidores y el futuro del sector estará marcado por un crecimiento en el autopago, el liveshopping y la realidad aumentada.
Napse, empresa dedicada a digitalizar el retail en México, señala que la acelerada adopción del uso de tecnologías de información y del comercio electrónico por parte de los consumidores durante la pandemia facilita que se sientan más cómodos adoptando nuevas herramientas y formatos para hacer sus compras.
En este sentido, aunque el autopago ha sido una opción que aún no despega, este presenta un crecimiento gradual y sostenido. La iniciativa de empresas como Oxxo, Walmart y La Comer, entre otras, para integrar estas tecnologías –vía cajas o apps– en sus formatos incrementará su adopción entre la población que consume en estos puntos de venta.
Entre las ventajas que el consumidor encuentra al utilizarlas están la reducción de contacto con personal del punto de venta y la reducción del tiempo del proceso de pago. De acuerdo con un estudio de Capgemini las cadenas comerciales han registrado un aumento de 11% en visitantes entre tiendas que cuentan con la opción de autopago y las que no.
Las compras en vivo son el cruce entre las transmisiones en vivo que ocurren en las distintas plataformas digitales (redes sociales, marketplaces o ecommerce) y la compra inmediata de bienes o servicios. Sus antecesores son los canales de compra como QVC o CJ Grand –conocido en México como CV Directo–, sin embargo, por ser programas de TV requerían mucha más inversión y estaban sujetos a que las personas hicieran una llamada (a un call center) para realizar su pedido. Hoy, en el mundo digital, cientos de miles de personas pueden comprar simultáneamente el mismo producto o servicio con un solo clic.
En 2021 Facebook, Twitter y YouTube anunciaron sus canales de Liveshopping en Estados Unidos. Aunque aún no es una modalidad popular en México, la cercanía con el vecino del norte y su influencia comercial y cultural, así como la rapidez con que México adopta tendencias digitales, serán los catalizadores para que los comercios y consumidores de México encuentren valor en la modalidad de compras en vivo.
Otra tendencia que se verá en los comercios mexicanos con más fuerza es la realidad aumentada (RA) que le permite a las personas probar cómo luciría un artículo en sus personas o espacios físicos. Los consumidores pueden tener una experiencia inmersiva sin necesidad de visitar físicamente el comercio en categorías como muebles, ropa, zapatos, maquillaje, joyería y juguetes, principalmente.
Un claro ejemplo de lo anterior se puede ver en la herramienta de compra de realidad aumentada, Room Decorator, que Amazon lanzó en 2020 que permite ver muebles y otras decoraciones del hogar en su propio espacio. Si bien el minorista había experimentado con herramientas de RA en el pasado, lo que hace diferente a Room Decorator es que es capaz de agregar virtualmente varios productos a la habitación al mismo tiempo.
“Las cadenas comerciales tendrán la oportunidad para mantenerse vigentes ante las cambiantes preferencias de sus clientes al ofrecerles nuevas formas de interactuar con su oferta, además de acompañar las compras con una mejor experiencia, más allá de los productos. Nos parece que para los consumidores 2022 será un año muy interesante”, afirma Martín Malievac, director de Investigación y Desarrollo de Napse.
La compañía especializada en el sector retail en México, comparte además algunos elementos que elevan la satisfacción de los clientes y que seguirán presentes durante 2022:
- Entregas rápidas en compras online, ya sea el mismo día o durante la misma semana de la compra.
- Envíos y devoluciones gratuitas y sin complicaciones.
- Nuevos canales y formas de interacción: tiendas físicas con presencia en ecommerce o marketplaces y marcas digitales con puntos de ventas físicos a través de tiendas temporales o pop-up stores.
- Personalización de oferta, los consumidores quieren ser identificados y no uno más en el montón.
- Generar empatía y recompensar, para estar en la mente de los consumidores.