Una encuesta publicada por Panduit señala que la mayoría de los CIO reconoce que el detalle, la eficiencia y la precisión en la gestión de activos dentro del DCIM aportan grandes beneficios si de la gestión del centro de datos se trata. Y es que las densidades de potencia de equipos han aumentado de manera constante junto con las presiones sobre la administración de centros de datos para extender los ciclos de vida de las instalaciones con mayor capacidad y la utilización de activos.
Como resultado, se imponen mayores restricciones en los recursos y el valor extremo se coloca en las operaciones de centros de datos eficientes. Además, un aumento en tendencias como cloud computing y la virtualización está fortaleciendo la necesidad de mantener un registro exacto de los activos dentro de cada unidad de negocio. Así, las TI parecen haber pasado de aliadas a “problemas”.
Este aumento de los lugares de presión exige a los administradores de centros de datos modificar sus procesos a fin de optimizar sus activos existentes robusteciendo su sistema de TI con recursos y presupuestos limitados. Lo mismo ocurre con los integradores, que se enfrentan al reto de optimizar los recursos existentes a la vez que deben elegir soluciones fáciles de integrar sin arriesgar ni la información ni la operación de la empresa.
El riesgo de una mala decisión
Hoy en día existen varios enfoques DCIM disponibles, incluyendo las técnicas de seguimiento de activos independientes. La mayoría de estos enfoques sólo monitorean el consumo de energía y la refrigeración; sin embargo, se olvidan de la gestión de activos en las líneas laterales. El resultado es que estos métodos generalmente no son capaces de proporcionar una solución de seguimiento de extremo a extremo de activos.
Otra opción es la administración por agrupación. Aunque sí es una estrategia útil para los proveedores de servicios de cloud computing, ofrece poca información registrada respecto
utilización de recursos; lo que puede dejar a los administradores de instalaciones varados en caso de requerir información crucial.
Un tercer método es el mapeo. Llevar un registro de este tipo permite la adquisición de activos y la gestión de trámites generales tales como facturas, contratos de arrendamiento, sistemas de reembolso, licencias, renovaciones y disposiciones. Pero si hablamos de sistemas pequeños, a menudo estos mapeos se hacen a partir de hojas de cálculo tradicionales. Esto, en el largo plazo, dificulta la obtención de reportes reales y en tiempo.
Infraestructura Física Unificada, una solución contundente
Actualmente, existen en el mercado soluciones que integran y optimizan todos los elementos que hacen de los Centros de Datos una entidad dinámica, con infraestructuras físicas y lógicas operando 24×7. Esta visión única, integral y holística de la instalación trae como resultado un monitoreo amplio, incluso de los mínimos detalles, del ciclo de vida de activos que pueden ser utilizados por todos los departamentos y los equipos interesados.
Una solución de este tipo –es decir, una infraestructura física unificada (UPI, por sus siglas en inglés)– montada en el Centro de Datos permite a las empresas determinar la ubicación física de cualquier activo en el sistema. Esto se traduce en una reducción importante del número de bienes perdidos, lo que mejora el aprovechamiento de los recursos existentes, y reduce el desperdicio y los gastos operativos.
Una Infraestructura Física Unificada (UPI) brinda importantes beneficios, como:
- Capacidades de monitoreo de software para enfrentar desafíos comunes del Centro de Datos.
- Solución a problemas de conectividad de red hasta 80% más rápido que los sistemas no administrados.
- Agilidad en la transición de un sistema a otro más actual.
- Implementación de 50 % a 70 % más rápido que otros competidores de paneles inteligentes, sin necesidad de suspender la red durante el proceso de implantación.
- Máxima seguridad gracias a la capacidad de identificar la ubicación física exacta de un acceso no autorizado a la red y 90 % más rápido que otras soluciones similares.
- Consolidación de la capa física y las soluciones de gestión del medio ambiente en una sola plataforma de software PIM ™.
- Generación de MACs precisos y 75 % más rápido que los sistemas no gestionados.
- Ahorros por eliminación de auditorías de inventario de activos y conciliaciones.