A la modelo, conductora y empresaria mexicana se le fueron sus dos Yayas, pero encontró a la
tercera, la mujer que hoy es su inseparable y con quien posa por primera vez y exclusiva para Vanity
Fair México. A punto de cumplir 50 años, Montserrat se siente más plena que nunca. ¿Por qué? “Quizás para vivir el momento más feliz hay que pasar por el más triste”
En 2014 fallecieron los tres pilares que rodeaban a Montserrat: su madre –a la que toda la familia llamaba Yaya –y sus dos tías. Una noche, un año después de la tragedia, la conductora mexicana cierra los ojos y habla con su difunta madre pidiéndole una señal. Al abrir los ojos, revisa su celular y se encuentra con un mensaje de WhatsApp de un número desconocido que dice: “Hi, I´m Yaya”. Observa la foto de perfil y es un oso polar, mientras piensa que debe ser una broma del destino.
La tal Yaya resultó ser Yaya Kosikova, una fotógrafa eslovaca que trabajaba en Planet Foto y que había sido agregada a un chat común con Montserrat. El motivo del chat era una reunión de fotógrafos en una exposición en Nueva York. Ambas estaban invitadas.
Montserrat cumple 50 años este mes y luce espectacular. Es una de las personalidades más reconocidas y predilectas de la televisión mexicana. Las especulaciones sobre su preferencia sexual le han deparado algunos quebraderos de cabeza con la prensa rosa, pero nada de eso la ha detenido. Para ella, la clave del éxito, es: “La audacia. Y sobre todo que disfruto lo que hago y así progreso”.
Vanity Fair se encontró con ambas en el estudio de fotos de Montserrat, Yaya´s Studio, ubicado en Polanco en la Ciudad de México. Tras recorrer habitación por habitación de la casa donde vivió su abuela, la modelo mexicana nos cuenta su historia. A los dieciséis años comenzó a modelar. Se casó con un empresario y se mudó a Miami donde apareció en varias revistas famosas y empezó su carrera como presentadora de Telemundo, después de varios años en Estados Unidos, Montserrat se divorció y “cambió de rumbo”. Al preguntarle a qué se refiere con este cambio, respondió: “Me refiero a lo que me refiero. Cambié de rumbo y me instalé en México”. Ya instalada en Polanco, continuó con su carrera como conductora, productora y empresaria.
Cuando Yaya se incorporó a la plática, le preguntamos acerca de su nueva casa en México y las diferencias con Eslovaquia: “Totalmente distinto. Pero llevé a Montserrat a conocer a mi familia y decía que le recordaba a la suya en algunas cosas”.