Cada día, más de un millón de personas en el mundo contrae una infección de transmisión sexual (ITS) y en México, al menos 30% de las personas con una vida sexual activa padecen una ITS. En la mayoría de los casos las infecciones son asintomáticas o van acompañadas de síntomas leves que ayudan a su diagnóstico, como son algunas alteraciones en la piel, alertaron especialistas de la Fundación Mexicana para la Dermatología (FMD).
Al respecto, la doctora Susana Canalizo Almeida –especialista en dermatología– explicó que las ITS se propagan principalmente por contacto sexual, incluidos el sexo vaginal, anal y oral. Así como por medios no sexuales como transfusiones de sangre, besos y contacto piel con piel.
Las ITS sexual afectan principalmente a hombres y mujeres entre 15 a 24 años de edad y representan 1 de cada 10 consultas en consulta general. De acuerdo con cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el número de personas con infección genital por el VHS-1 –herpes simple– supera los 500 millones y en el mundo hay más de 290 millones de mujeres infectadas con el virus del papiloma humano (VPH), una de las ITS más comunes.
El herpes simple es una infección viral de transmisión por contacto, que tiende a reaparecer después de un periodo de curación. Una vez contraído el virus se tiene para siempre, aunque no se presente ningún síntoma y puede activarse en cualquier momento, refirió Susana Canalizo, integrante de la FMD.
“Aunque es un virus que se diagnostica fácilmente, es incurable. Existen antivirales que alivian los síntomas y ayudan a reducir la duración de las crisis, que presentan 4 o 5 brotes al año y, con el tiempo, reducen su frecuencia y son más leves. Las lesiones suelen aparecer en el mismo lugar cada vez que se reactiva la enfermedad”, explicó la especialista.
A nivel mundial el 67% de la población menor de 50 años está infectada con el virus del herpes simple tipo 1 (VHS-1). “En algún momento de la vida lo hemos padecido por medio de los molestos fuegos labiales o mediante la transmisión sexual y son los besos la principal fuente de contagio”, advirtió.
Al transmitirse principalmente por contacto de boca a boca (besos), el VHS-1 provoca herpes labial –calenturas o ámpulas labiales– o por contacto con este virus en las úlceras, la saliva y los labios. No obstante, también puede transmitirse a la zona genital por contacto bucogenital –sexo oral–, lo que provoca herpes genital.
“El contagio suele ser vía directa de una persona con una lesión activa. El contacto de piel con piel, compartir utensilios para la comida, cuchillas de afeitar y toallas pueden diseminar la infección”, afirmó la doctora Susana Canalizo.
El VHS-1 se manifiesta como vesículas o úlceras en la boca o a su alrededor, las cuales son muy dolorosas; antes de su aparición los pacientes notan una sensación de hormigueo, picor o quemazón.
Por otra parte, el virus del papiloma humano (VPH) es una infección de transmisión sexual que además se contagia por el contacto de piel a piel. Se estima que aproximadamente 80% de las mujeres sexualmente activas se contagian con al menos un tipo de VPH en algún momento de su vida y el porcentaje es mayor en el caso de los hombres.
Más de 5 millones de personas en el mundo adquieren VPH cada año y aproximadamente el 74% de los casos ocurre entre los 15 y los 24 años de edad. “Es la infección de transmisión sexual más frecuente, cuyas manifestaciones cutáneas –verrugas genitales o condilomas– aumentan el riesgo de desarrollar cáncer del cuello uterino”, afirmó la integrante de la FMD.
“Es una enfermedad silenciosa y rara vez causa síntomas: tan sólo el 50% de los hombres con VPH genital no manifiestan signos de alerta, lo cual hace más difícil su diagnóstico. En otros casos las personas que han sido infectadas desarrollarán verrugas rápidamente a unas semanas o meses de después del contacto sexual”, explicó Canalizo Almeida.
Las afecciones de la piel más frecuentes por el virus del papiloma humano en un 70% son las verrugas cutáneas, también llamadas verrugas vulgares, comentó la doctora Susana Canalizo y añadió que “pueden surgir en diferentes partes del cuerpo, pero lo más común es que aparezcan en cara, manos y pies (en los talones o en la planta del pie)”.
Son pequeños bultos duros y elevados que pueden ser dolorosos, al caminar causan incomodidad, “pueden presentar micro hemorragias que se ven obscuras, suelen confundirse con un cuerpo extraño”, agregó.
Otra de las manifestaciones son las verrugas genitales (condilomas) que son lesiones planas, pequeños bultos con forma de coliflor o protuberancias más pequeñas con forma de tallo. En las mujeres aparecen en la vulva, cerca del recto, el cuello del útero o en la vagina; mientras que en los hombres se encuentran en el pene, el escroto, alrededor del recto y algunas veces, dentro de la uretra.
“Es poco común que los condilomas generen dolor o incomodidad, aunque es posible que piquen, produzcan comezón o una sensación de ardor en la piel. En el caso de lesiones grandes pueden causar mal olor”, detalló.
La experta mencionó que los condilomas son muy contagiosos y se transmiten de la pareja infectada durante el sexo oral, vaginal o anal. “Es importante mencionar que los besos o tocar los genitales de la pareja con las manos o la boca, también contagian el VPH, inclusive llegando a aparecer lesiones en boca. También por el uso de juguetes sexuales contaminados con el virus”, advirtió.
Es importante evitar remedios caseros o tratamientos de dudosa procedencia porque pueden generar complicaciones y retardar el proceso de curación de las lesiones. “Por ello se debe alentar a la población en general a auto-examinarse para identificar posibles lesiones en la piel o, si padecen alguna ITS, evitar el contagio a personas sanas, así como consultar a un dermatólogo certificado o al médico general para recibir orientación”, concluyó la integrante de la FMD.