Hace diecinueve meses, Florencia Guiñazú (“Flor”) y Gabriel Guini (“Gaby”) emprendieron una fascinante aventura: recorrer América hasta llegar a Alaska, a bordo de una Renault Kangoo.
El 9 de julio de 2013, casualmente el día de la independencia de su natal Argentina, salieron de Buenos Aires para iniciar este apasionante viaje, al cual llamarían “Te quiero hasta Alaska”. Al día de hoy, han pasado por Argentina, Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia, Venezuela, Brasil, Guyana, Surinam, Guyana Francesa, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Honduras, El Salvador, Guatemala, Belice y, actualmente, recorren México; sumando así dieciocho países de los veintiuno que habrán de visitar antes de arribar a su destino el próximo verano.
A México llegaron el primer día de noviembre del año pasado y ya han viajado por la Península de Yucatán, Chiapas, Campeche, Oaxaca, Puebla y el Distrito Federal, sin duda uno de los puntos más importantes dentro de su recorrido.
En el Blog www.tequierohastaalaska.com.ar y el Facebook Te quiero hasta Alaska, registran su bitácora de viaje, documentando en tiempo real los días y kilómetros transcurridos; contando con sus palabras y con fotografías todo lo que les sucede durante el recorrido. Además, se presentan a ellos mismos e indican las adecuaciones que realizaron a la Renault Kangoo que los acompaña en esta aventura y a quien ellos mismos llaman cariñosamente “La Kangooneta”:
- Flor es una Licenciada en Comercio Internacional de 31 años, que apenas hace un año y medio trabajaba en ventas y por su oficio pasaba mucho tiempo viajando en aviones.
- Gabriel, de 29 años, es un soñador empedernido, según lo describe Flor. Es un apasionado de la fotografía con experiencia en cine, publicidad y televisión. Y es, además, el autor intelectual de la idea del viaje. Ellos llevan juntos 9 años y, hoy, son compañeros de vida y de ruta.
- La Kangooneta es la otra gran protagonista de esta aventura; una Renault Kangoo año 2006 (el año en que Flor y Gaby se conocieron), con motor 1.6 16v. que compraron en 2009 con 35 mil km de uso, pero que desde entonces han disfrutado como si fuera nueva. Al día de hoy suma 150 mil km (39,695 km han sido de estos primeros diecinueve meses de viaje, en los que ha recorrido todo tipo de caminos, como asfalto, grava, arroyos y montañas).
“La Kangooneta es nuestra casa desde que inició esta aventura, y aunque mide tan sólo 4 metros cuadrados, una vez que abrimos el portón trasero, nuestro jardín es América” señala Gabriel. “Desde que la tenemos nos dimos cuenta de que es genial para viajar, tiene una gran visión panorámica y podemos recorrer casi 500 km con 40 litros de gasolina” agrega Flor.
Para viajar más cómodamente a bordo de la Kangooneta, Flor y Gabriel realizaron distintas adecuaciones. Fue así como surgió la idea de tener una cama en la parte de atrás, haciendo una estructura de madera con varias divisiones para guardar la ropa, las refacciones, una alacena y un anafe.
También colocaron cortinas alrededor que dejan caer por las noches para que no se vea el interior del vehículo desde afuera. Para iluminar, cuentan con dos tiras de LED, una en la parte trasera y otra sobre la ventana trasera del lado del conductor. Además, instalaron un portaequipajes tipo parrilla y un toldo que se extiende dos metros, ideal para estar sentados los días de mucho sol o lluvia.
Actualmente, Kangoo forma parte de la gama de vehículos utilitarios de Renault México. Cuenta con una amplia capacidad de carga, combinando a la perfección la comodidad y la practicidad que pide cualquier tipo de negocio. Además, sin duda alguna, su adaptabilidad, rendimiento y durabilidad lo convierten en una gran opción para emprender un largo viaje.