De gran historia y prestigio, Boodles London Dry Gin llega a México para sorprender y encantar a los amantes de la ginebra, incluso a los paladares más exigentes. La particularidad del sabor de Boodles, reside en su simpleza y balance, al estar libre de perfumes presuntuosos, siendo así el perfecto gin para cocteles clásicos y etéreos, potenciando los sabores y aromas de un coctel perfecto.
La historia de este ginebra británico comienza en 1845, cuando los fabricantes de gin más importantes del mundo en su época, Joseph E. Seagram y sus hijos, se inspiraron en el prestigio del Club Boodles, punto muy respetado de reunión de caballeros de alto nivel para crear una extraordinaria ginebra londinense, digna de los gustos más refinados como lo tenían los miembros del club, personalidades memorables como Ian Fleming o Sir Winston Churchill.
Boodles, destilado en Inglaterra para cuidar y hacer honor a su nombre, es resultado de un proceso que comienza por un destilado claro de trigo, para posteriormente ser procesado en un alambique de cobre, manteniendo los elementos botánicos con una infusión paulatina.
Es así como nace Boodles London Dry Gin, una sutil mezcla de ingredientes botánicos que resaltan su sabor, yendo desde el enebro, nuez moscada, savia y romero, hasta las semillas de alcaravea, semillas de cilantro, raíz y semillas de angélica y corteza de cassia, convirtiendo a Boodles en la ginebra reconocida por los sabores de enebro más discretos y puros.
Al paladar, Boodles cuenta con sabores al fruto del junípero, notas de tierra y pimienta negra, con un retrogusto inconfundible a cardamomo con ausencia de cítricos, dándole la frescura marcada de una ginebra pura, sin perfumes y gran balance, ideal para preparar el mejor Gin & Tonic o para mezclas con hierbas o frutas naturales con personalidad y permanencia prolongada en boca.
Una marca etérea y elegante, así es como llega a México Boodles London Dry Gin, con el respaldo de una historia tangible de cientos de años y para quienes valoran y están en búsqueda de una ginebra auténtica y genuina, sin perder el toque clásico y sofisticado, recordándonos que lo simple también puede ser divertido y elegante.