Muchas ocasiones hemos visto que la rivalidad deportiva dentro de una cancha de futbol contagia a la afición, prensa y al ambiente que envuelve al deporte más hermoso del mundo, creando polémica innecesaria, ambiente hostil e incluso agresiones físicas y verbales, causado por un mal manejo de la pasión entre dos equipos que se enfrentan únicamente en el rectángulo verde.
Vivimos en una época donde la tolerancia, el respeto y la hermandad deben de ser factores comunes en todos los rincones del mundo, a pesar de los mensajes que recientemente promulgan lo contrario entre la población. Un deporte que mueve masas y que es generador de cambio es el futbol, por lo que ahora, gracias a Corona, países históricamente rivales en las canchas, se abrazan en pro de la hermandad y del juego limpio.
Corona fue el promotor de las fotos en conjunto en los partidos de la Selección Nacional de Futbol, que se tomó con la selección de Estados Unidos, misma que sirvió para derribar muros y demostrar que la rivalidad únicamente es en el campo, siendo hermanos fuera de él. Los detonantes para que sucediera este emotivo momento fueron los históricos capitanes, Rafael Márquez y Michael Bradley, quienes demostraron un profundo Fair Play y respeto mutuo.
Por tal motivo, la marca desfronterizada da un mensaje contundente, de respeto y amor a nuestros semejantes, sin importar origen, raza ni condición, ya que todos somos amantes del futbol, sin importar nada más.
Además, este tipo de fotos marcan un precedente mundial, mismo que seguramente será replicado en todas las latitudes futbolísticas, como en el pasado partido entre México y Panamá, hecho que Corona celebra para seguir derribando muros mentales en cualquier lugar en el que ruede un balón.
Corona seguirá promoviendo iniciativas relacionadas con el futbol, que ayuden a todos los involucrados en el deporte a romper sus propias fronteras.