Para Philippe Cousteau, nieto del célebre explorador submarino de origen francés, Jacques Cousteau, Los Cabos, el Mar de Cortés y Cabo Pulmo, ubicados en Baja California Sur, son sitios que cautivan y que resultan de gran importancia mundial por su belleza natural y la abundancia de especies marinas que ahí habitan.
En su última visita por Los Cabos, el historiador de carrera y heredero de la dinastía Cousteau, resaltó que nuestro país tiene uno de los mejores ejemplos en conservación, y ese es Cabo Pulmo.
Durante una conferencia dictada a más de 200 asistentes, en el hotel Las Ventanas al Paraíso, el ambientalista dejo en claro que todos los seres humanos debemos cuidar los recursos naturales y las especies con las que cohabitamos el planeta.
Con el objetivo de crear conciencia sobre la preservación de nuestros recursos naturales, Cousteau habló sobre sus experiencias en Mar de Cortés y Cabo Pulmo.
En su ponencia, que escucharon atentamente biólogos, hoteleros, profesores, estudiantes, turistas y población en general; el ambientalista proyectó diversos documentales de su abuelo y dedicó tiempo para preguntas y respuestas.
El co-fundador de EarthEcho International, una organización educativa sin fines de lucro, comentó que el interés de los jóvenes es fundamental para convertir al mundo en un lugar mejor.
«EarthEcho International trata de inspirar y motivar a la gente joven, como agentes del cambio de la sociedad. Los jóvenes tienen un poder tremendo para cambiar el mundo, y la educación es fundamental, si vamos a adoptar soluciones sociales y ambientales, necesitamos nuevas ideas», subrayó el ambientalista.
Durannte su estadía en Los Cabos, el también corresponsal de CNN, navegó por el Mar de Cortés, admiró la fauna marina y observó muy de cerca a la ballena gris, que en esta época del año llega a Baja California Sur, desde los fríos mares de Alaska y Bering, en busca de aguas cálidas para aparearse y parir a sus ballenatos.
Jacques Cousteau fue un gran admirador de la biodiversidad y belleza del Mar de Cortés, que lo llevó a nombrarlo «el acuario del mundo» por sus 34 especies de mamíferos marinos, 891 tipos de peces, cinco especies de tortugas, más de 4 mil 800 invertebrados, e incluso, 181 variedades de aves. Algunas de ellas, como la vaquita marina, únicas en el mundo.