Es necesario rediseñar las oficinas para apoyar de manera dinámica la interacción de las personas. Kivo, el nuevo sistema modular de Herman Miller, proporciona el equilibrio perfecto entre el espacio abierto y la privacidad, delimitando áreas para concentrarse pero también permitiendo estructuras ideales para una colaboración dinámica.
De la mano del talentoso diseñador alemán Alexander Lorenz, Herman Miller logró la mezcla idónea entre precisión y movimiento para darle vida a Kivo.
Atraído por la geometría, simplicidad y versatilidad del triángulo, Lorenz desarrolló un complejo algoritmo que le permitió modelar digitalmente miles de combinaciones estructurales diferentes que abren un sinfín de posibilidades para adaptarse a lugares individuales o abiertos y que perfectamente se complementan con otros productos de la cartera de Herman Miller.
Kivo transforma cada lugar de trabajo en un lienzo flexible que se puede expandir o reducir según las necesidades del momento, gracias a una ligera estructura de acero y fichas magnéticas simples que le permiten cambiar de forma las veces que sea necesario con mucha facilidad.
Con el uso de Kivo se puede configurar un área individual, libre de interrupciones, ya que la combinación de materiales brinda amortiguación acústica y genera una poderosa estructura arquitectónica en colores vivos y en tonalidades claras.
La estructura de acero pulido proporciona un marco fuerte que hace de Kivo un sistema que, gracias a sus módulos triangulares, da una sensación única de diseño en forma de mosaico geométrico sofisticado y altamente funcional.