El mercado de oficinas de la Ciudad de México tuvo que esperar poco más de dos años para tener un respiro y que los niveles de actividad volvieran a los niveles previos a la pandemia, registrando una absorción neta positiva y una tasa de disponibilidad que se ha detenido, algo que no sucedía desde el cuarto período de 2019. Sin embargo, aún está lejos de alcanzarse la estabilidad en dicho segmento inmobiliario.
En el reporte de actividades del mercado de oficinas de la Ciudad de México, correspondiente al primer semestre del presente año, elaborado por Mauricio Mondragón, analista de la división de Investigación de mercados de Newmark, se subraya que una vez más, el inventario de oficinas clase A se incrementó en el segundo trimestre, agregándose cerca de 75 mil metros cuadrados, lo que lo acercó a la marca de los 8 millones de metros cuadrados (7.8 millones de m²).
Sin embargo, hay que considerar que, por las condiciones del mercado, hay una tendencia importante de cambio de giro en los edificios de oficinas, por lo que es posible que los 1.2 millones de metros cuadrados en construcción, no vean la luz como espacios corporativos.
Dentro de la actividad de los corredores corporativos en la capital del país, se registraron arrendamientos en los corredores Polanco, Insurgentes y Norte, principalmente, que en conjunto reportaron el 60% de los 148 mil metros cuadrados ocupados durante el período.
“Además de las ocupaciones anteriores, es importante destacar que dentro del corredor Lomas Altas se concretó una de las operaciones en venta más importante de los últimos años. Esta compra-venta de más de 29 mil metros cuadrados de oficinas, ocurrió en el edificio más nuevo de este submercado y definitivamente le ha cambiado el panorama a un corredor que presentaba una sobreoferta importante”, señaló Karen Gutiérrez, analista de la división de investigación de mercados de la empresa.
Así, la ocupación acumulada al cierre del primer semestre del año fue de más de 219 mil metros cuadrados, que representó un incremento del 54%, respecto al mismo período del año pasado; la absorción neta salió de niveles negativos y cerró el período con 29 mil 720 metros cuadrados, con una tasa de disponibilidad que finalmente rompió la tendencia ascendente que tenía desde hace más de dos años y terminó el trimestre en 23.8%, apenas 0.7% por debajo del período anterior. Sin duda, esto es una mejoría considerable para el mercado de oficinas, pero la cifra que ha cambiado por completo la cara al mercado es la de desocupaciones.
Durante el primer semestre de 2022, se registraron cerca de 155 mil metros cuadrados desocupados en edificios clase A y A+, lo cual representó una reducción del 52%, comparado con el mismo período de 2021.
“Hay que tener muy claro que seguimos hablando de un mercado sobreofertado que está muy cerca de su nivel histórico más alto de espacio disponible (alcanzado apenas el trimestre pasado). Estos casi 1.9 millones de metros cuadrados de espacios corporativos vacantes son un lastre que el mercado de oficinas arrastrará durante años. Su recuperación dependerá no solamente de los actores dentro del mercado de oficinas, sino principalmente de los factores económicos nacionales e internacionales que permitirán o ralentizarán el crecimiento y surgimiento de empresas que impulsen la economía y sean demandantes de espacios de oficinas”, precisó Karen Gutiérrez.
Agregó que la actividad económica del país sigue en proceso de recuperación y en la Ciudad de México el empleo formal muestra el quinto mes de crecimiento desde enero pasado, destacando en especial el mes de junio donde se alcanzó la cifra 24 mil empleos formales acumulados, de acuerdo con estadísticas del IMSS.
“Sin duda, el entorno de incertidumbre internacional y el incremento de tasas de interés han impedido una recuperación plena. Algunas actividades como el sector primario cayeron en -1.3%; el secundario sólo creció en 0.6%; pero el sector terciario, que tiene le mayor impacto en el mercado de oficinas, creció en 1.3%, lo que se refleja en ocupaciones destacadas que vinieron de empresas de entretenimiento, tecnología, telecomunicaciones, entre otras”, apuntó finalmente Gutiérrez.