La pandemia de coronavirus ha cambiado drásticamente la vida de muchos mexicanos que permanecen en sus casas y realizan salidas esporádicas –principalmente para la compra de alimentos– desde hace más de dos meses.
Esta situación, casi inaudita, ha cambiado también los hábitos de higiene de las personas, ya que durante el proceso de adaptación a sus nuevas rutinas 7 de cada 10 mexicanos dejaron de bañarse diariamente y más de la mitad (hombres y mujeres) se rasuran con menos frecuencia.
Así lo revela la encuesta «Hábitos de cuidado personal durante COVID-19» realizada por IPG Mediabrands para BIC, que señala que si bien un 70% de encuestados manifestó que cumplir con una rutina de cuidado e higiene permite a las personas sentirse bien consigo mismas y preparados para el día, 8 de cada 10 hombres y 7 de cada 10 mujeres se sienten con mayor libertad en cuanto al cuidado de su imagen o la exigencia de rasurado e higiene que antes de la cuarentena.
Es así que 62% de hombres y 55% de mujeres cambiaron sus hábitos de rasurado. Por su parte, el 19% dice que mantener sus hábitos de aseo durante estos tiempos extraordinarios es una forma de respeto hacia las personas con las que viven.
Los resultados muestran que el 74% de los encuestados han participado en por lo menos una videoconferencia de trabajo. Muchos también se han mantenido en contacto a través de esta herramienta con su familia y amigos (70%), y un número relevante ha tomado clases o seminarios en línea (58%).
La encuesta indica que las videoconferencias son una de las principales razones para mantener la apariencia durante el encierro, por lo que el 42% de los participantes dicen poner mucho esfuerzo para verse bien en cámara. Sin embargo, 60% de los encuestados confesó que no enciende la cámara para atender una reunión en línea.
Además de lidiar con el estrés de esta situación, tanto hombres como mujeres, están luchando por mantener una rutina de belleza con poco o ningún apoyo profesional. Para cumplir con las reglas de distanciamiento social, el 79% declara no haber contratado ningún servicio a domicilio ni salido de casa para su arreglo personal. En este sentido, el 60% mantiene sus hábitos de belleza por sí mismos. Sin embargo, mientras que los hombres suelen pedir ayuda a sus parejas, las mujeres tienden a involucrar a otros miembros de la familia o compañeros de casa.
¿El COVID-19 ha cambiado los hábitos de higiene de las personas?
Según el estudio, los hombres han cambiado la regularidad con la que llevan a cabo su rutina de aseo, pero no su estilo o forma de hacerlo. Por otro lado, las mujeres se sienten menos obligadas a mantener su régimen de belleza normal.
Entre las mujeres encuestadas, sólo el 37% dijo que se preocupan mucho por su apariencia en este momento y las encuestadas de 26 a 35 años son las que menos se esfuerzan por su aspecto. En contraste, el 47% de los hombres encuestados dicen que su aspecto durante el encierro les importa mucho. Y curiosamente, ¡sólo 3 de cada 10 personas dicen que se duchan a diario!
El estudio concluye que, aunque 7 de cada 10 hombres y mujeres extrañan su rutina previa al aislamiento social, sus hábitos de autocuidado se han relajado. En cuanto a su vestimenta, más de la mitad de los participantes (52%) están eligiendo utilizar ropa más casual, siendo los jeans y las camisetas las prendas de trabajo más común. Además, el 13% dice que usan gorras o diademas para cubrir un mal día de cabello.
El 75% de los encuestados considera importante que las empresas redefinan sus códigos de vestimenta una vez que vuelvan a la normalidad. Es importante recalcar que, en esta nueva normalidad, las autoridades de salud recomiendan mantener buenos hábitos de cuidado personal, donde en el caso de los hombres, sugieren rasurarse barba y bigote, y no usar corbata, y en el caso de las mujeres evitar el uso de aretes, collares y pañuelos como medidas de precaución.
“Vivimos tiempos sin precedentes que han cambiado nuestra forma de comportarnos y la forma de cuidarnos a nosotros mismos” comentó Ricardo Ibarra, director general de BIC en Latinoamérica. “Sin embargo, para la mayoría de las personas que mantienen sus hábitos de cuidado e higiene personal, pueden confiar en la accesibilidad y calidad de los rastrillos BIC, que siguen las últimas tendencias en innovación y ofrecen un excelente desempeño para aquellos buscan la mejor rasurada.”
Para este estudio se entrevistó de manera digital a 475 personas mayores de 18 años, entre el 11 y 14 de mayo de 2020.