Por: Mauricio Sepulveda, director de Desarrollo de Negocios para PayPal Hispanoamérica
Para muchas personas, el teléfono móvil es una parte esencial de su vida diaria, de tal forma que, de acuerdo con un reciente estudio, 59% de los mexicanos volverían por su celular en caso de olvidarlo antes de salir. Ya sea para entretenimiento o para hacer compras online, actualmente en países como Estados Unidos, una persona puede llegar a pasar en promedio, casi tres horas diarias navegando en internet, cuando en el 2015 la media fue de dos horas con veinte minutos, según el estudio The Future of Retail 2018 de BI Intelligence.
Esto nos lleva a un aspecto de medular importancia, tanto para los usuarios de teléfonos móviles como para los negocios que integran el mCommerce. Se trata de la seguridad y fortaleza de la clave de acceso y el nombre de usuario. El consenso entre los expertos en seguridad cibernética es que precisamente los dispositivos móviles pueden llegar a ser más propensos a ataques de piratas cibernéticos, que pueden poner en riesgo los datos personales, según reportes del 2017 de Kount, MarketWired, Riskified y Singular.
En países con un consumo tecnológico acelerado, el riesgo de fraude en smartphones es aún más grande. Y el consejo es el mismo para todos: contar con un protocolo de autenticación sólida, es decir, un nombre de usuario y una clave de acceso fuertes.
Lo cierto es que por más sencillo que consideremos esa medida de seguridad, es lo más difícil que le resulta implementar a los dueños de teléfonos móviles y, en general, a los cibernautas. ¿Eres de los que usan la misma clave de acceso para varios comercios electrónicos? Si la respuesta es sí, entonces puedes ser una víctima potencial de fraude, de robo de identidad, correos electrónicos engañosos y aplicaciones cuyo objetivo es dañar el sistema operativo de tu móvil.
Lo ideal es que la clave de acceso o password se cambie cada cuatro meses, además de contar con varios factores que hagan viable una contraseña. En primer lugar, debe ser fácil de recordar por el usuario, que no sea muy difícil ingresarla, además de crear una mezcla de, por lo menos, 14 letras, números y signos que ayuda a que la clave sea más segura. Finalmente, ésta debe ser única para cada sitio, una buena opción es emplear un administrador de contraseñas para solo tener que recordar una sola combinación.
No es paranoia, al contrario, es precaución, y el siguiente dato lo sustenta: el robo de identidad constituye el 65% de todas las incursiones realizadas por los piratas cibernéticos, según un reporte de Gemalto. Este peligro no es exclusivo de los dueños de teléfonos sino del mcommerce en general, debido al uso cada vez más frecuente de los móviles para realizar compras y pagos. Los negocios arriesgan si no adoptan medidas de seguridad que los proteja a ellos y a sus clientes del fraude en las transacciones a través del teléfono móvil. Es por eso que, emplear plataformas confiables como PayPal puede reducir los riesgos de ser víctimas de transacciones fraudulentas, pues este procesador no comparte los datos financieros, ni personales con los comercios.
Definitivamente, este tema tiene gran pertinencia. El comprador que prefiere usar el móvil es relativamente más joven y dinámico, y aunque ciertamente es un reto lograr cautivar la atención en una pantalla diminuta, solo basta tener presente que la expectativa para el 2017, según el blog Riskfied, era que dos mil millones de usuarios de teléfonos inteligentes y tabletas realizarían al menos una compra móvil, y que el teléfono ya superó a la computadora de escritorio en cuanto a volumen de transacciones online.
No cabe duda de que entre más se incorporen las pantallas móviles a la vida cotidiana, también se vuelven más comunes los ciberdelitos, sin embargo, al seguir estas sencillas recomendaciones es posible reducir los riesgos de manera importante.