Por: Olivia Salas, Regional Marketing Manager de Red Hat México
Lo que caracteriza a las organizaciones digitalmente más avanzadas es su capacidad de reacción, adaptación e innovación en un entorno altamente competitivo. Esto no sería posible si los miembros de las áreas de TI no contaran con los conocimientos y las habilidades necesarios para estar a la par del dinamismo de sus mercados e industrias.
De hecho, los departamentos de TI más efectivos son aquellos cuyos miembros nunca dejan de aprender y están en la búsqueda constante de oportunidades para ampliar sus talentos y adquirir nuevas capacidades. No obstante, no siempre tienen el tiempo suficiente ya que deben cumplir con plazos de entrega cortos y atender las necesidades del día a día.
El apoyo de un CIO visionario, sin duda, es determinante para que sus equipos se preparen constantemente en el dominio de las nuevas tecnologías, así como en las llamadas soft skills (comunicación, trabajo en equipo, relaciones personales, administración, entre otras).
En este sentido, la velocidad con la que la tecnología cambia demanda que la cultura corporativa se ajuste rápidamente para que los grupos de TI aprendan cosas de forma más orgánica con las herramientas adecuadas.
Los CIO, junto con otras áreas funcionales de la empresa (Recursos Humanos, Marketing, Operaciones, por ejemplo), pueden determinar qué innovaciones y capacidades dominar, las cuales contribuirán a cumplir con los objetivos corporativos. No obstante, los expertos coinciden en que el mejor aprendizaje viene de las aspiraciones de los empleados y hacia dónde quieran dirigir sus talentos.
Capacitación = mayor eficiencia
Cuando se trata de invertir en capacitación, a menudo surgen dos preguntas: ¿cuál es el valor que aportará a la empresa? ¿y por qué debe darse prioridad al entrenamiento del equipo de TI?
Un estudio reciente de IDC, comisionado por Red Hat, reveló que la capacitación apunta a agilizar las operaciones de TI y apoyar los requerimientos empresariales y las nuevas tecnologías, logrando mejorar en 20% la eficiencia en la gestión de la infraestructura.
En particular, las organizaciones que han entrenado a sus expertos técnicos en soluciones de código abierto han experimentado 71% menos caídas no planeadas, los tiempos de respuesta del escritorio de ayuda (help desk) son 30% más eficientes y se obtiene un retorno de la inversión de 389% en tres años.
Específicamente, el estudio exploró los casos de uso de Red Hat Training, y descubrió que la capacitación inicial y el desarrollo constante de habilidades tecnológicas fueron fundamentales. La primera ofrece las capacidades que pueden tener un impacto en el éxito de un proyecto. En tanto, la asignación del 1.5% del presupuesto al entrenamiento mejoró el porcentaje de éxito de los mismos del 50% al 80%.
Como se mencionó anteriormente, dada la rapidez con la que cambia la tecnología y el entorno empresarial, los conocimientos con los que se cuenta actualmente pueden perder vigencia o desaparecen debido a la rotación y cambios en el personal. El estudio de IDC señala que el 60% de la capacidad de una organización se pierde en tres años, y para el sexto año el 75% del conocimiento original se esfuma. De ahí que la capacitación sea esencial para la adopción y relevo de habilidades.
Entre los beneficios adicionales de capacitarse en soluciones basadas en open source destacan:
- Gestión de las operaciones de TI y la infraestructura: la eficiencia de los administradores de TI mejoró un 20% y se perdió 71% menos tiempo debido a las caídas no planeadas de sistemas y aplicaciones.
- Solución de problemas y eficiencia del escritorio de ayuda: las llamadas al help desk se redujeron en 23%, los problemas se solucionaron 50% más rápido y los usuarios sufrieron menos interrupciones.
- Apoyo de TI para las necesidades de la empresa: el desarrollo de nuevas funcionalidades se aceleró en 12%.
Si bien algunas firmas pueden mostrarse renuentes por el temor a que su talento sea atraído por la competencia, la recompensa es invaluable. De ahí la importancia de complementar su preparación con un atractivo plan salarial y de beneficios, así como promover una cultura de pertenencia para que ‘se pongan la camiseta’ y trabajen en pos de los objetivos empresariales.