Cuando vamos al supermercado y tenemos que elegir el producto que buscamos, nos surgen varias incógnitas antes de seleccionarlo de entre las distintas marcas expuestas en el anaquel. En fracción de segundos, uno de estos artículos nos seduce y hace que lo prefiramos de entre los demás. Pero, ¿qué elementos son los que nos influyen en esta decisión de compra?
En ese determinante momento de decisión, el empaque del artículo es uno de los anzuelos clave para enamorarnos. “Es fundamental para la adquisición de los productos. En primera instancia juega un papel importante, ya que es el primer acercamiento que se tiene. Puede hacer que llame la atención o que aleje a los posibles consumidores.”, alerta Karla Barajas Portas, doctora en Marketing Avanzado y catedrática de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad Anáhuac del Norte.
Para que un artículo seduzca al consumidor, su presentación debe ser llamativa, funcional e innovadora; elementos fundamentales para responder a las necesidades del mercado. Pero esto es sólo el principio. “Es indispensable ofrecer beneficios al consumidor, brindándole productos de la mejor calidad a un precio competitivo”, explica Alfonso Vázquez, director comercial de Atún Dolores, que recientemente fue galardonada con el distintivo Marca de confianza 2016. A estos elementos se suma la innovación en la presentación de los productos enlatados. “En eso hemos hecho una ardua labor para comprender e identificar las necesidades del consumidor; podemos decir que lo hemos enamorado”, señala el directivo.
Por otra parte, la doctora Barajas añade que el producto debe aportar un significado al consumidor. “Es decir, si la adquisición de éste mejora su vida o no. Esto puede implicar todo tipo de necesidades, desde las más básicas como la alimentación, hasta las más elevadas como la autorrealización”, detalla. Una vez cubierta esta necesidad, argumenta la académica, el segundo elemento que preocupa al comprador es el precio. “Entiéndase como el importe monetario, más los costos de oportunidad de la adquisición del producto, es decir, qué deja de comprar el consumidor al adquirirlo, y cuáles son las carencias que enfrentará al comprarlo”, apunta.
En nuestro país este elemento es determinante, según revela un estudio de la consultora británica The Future Laboratory, que destaca que 68% de los mexicanos son altamente conscientes del costo de los productos o servicios a la hora de adquirirlos; sin embargo, no es el único factor a considerar, también existen condicionantes de tipo social que empujan a los consumidores a comprar determinado artículo. “Dicho de otra forma, hay productos que uno compra para alguien, o por alguien más”, aclara la investigadora.
El alto número de consumidores en México, ha puesto a este país a la vanguardia en América Latina en el renglón de la innovación en los diseños de empaques comerciales que compiten en el piso de venta. Esto responde a una creciente dinámica que exige un gran esfuerzo de las marcas para mantener presencia de un hambriento sector de consumo privado en el país que, de acuerdo con cifras del INEGI, en agosto pasado subió 4.3% respecto al mismo mes de 2015.
Una de las marcas que más han aportado a la evolución de los empaques con resultados exitosos es Atún Dolores, con distintas líneas enfocadas a mejorar constantemente la experiencia del consumidor, como su presentación en lata de colores con tapa y cucharita, un novedoso diseño que revolucionó el anaquel de los autoservicios en 2015. Hoy, su enfoque apunta a una oferta saludable y de gran sabor, con la presentación de atún bajo en sodio y a la mexicana. Sin duda, estas iniciativas explican el porqué de su reconocimiento como Marca de confianza 2016.