El viernes pasado se dio el fallo de los procedimientos de contratación de los servicios de hemodiálisis (intramuros y extramuros) en beneficio de más de 25 mil derechohabientes; bajo los mayores estándares de calidad y confiabilidad en el servicio.
Como en todos los procedimientos de contratación del IMSS, en éstos se garantizó la transparencia en todas sus etapas: los proyectos de convocatoria se publicaron para consulta pública durante 15 días hábiles previo a la publicación de la convocatoria; se contó con el acompañamiento de testigos sociales, y durante la junta de aclaraciones se respondieron casi mil preguntas, aportando mayores elementos a los proveedores para la presentación de sus propuestas.
También se fomentó la competencia: se reorganizaron las partidas en todo el país para permitir una mayor participación de proveedores locales; se simplificaron las especificaciones técnicas sin menoscabo de la calidad, y se utilizaron mecanismos innovadores como el de ofertas subsecuentes de descuento (subasta en reversa) que garantizaron mejores condiciones económicas de contratación. Gracias a estas medidas, se contó con una mayor participación de la proveeduría (32% más que en la última licitación en 2011) y el precio promedio ponderado por sesión en hemodiálisis extramuros disminuyó en un 23% nominal (29% en términos reales), mientras que en hemodiálisis intramuros la disminución fue del 61% (64% en términos reales).
Con los nuevos precios, el IMSS ahorrará cerca de 1,360 millones de pesos anuales durante los siguientes 4 años, lo que equivale a poco más del 10% de su déficit anual o el costo de construcción de dos hospitales. Estos ahorros, que alcanzarán los 5,400 millones de pesos en los siguientes 4 años, permitirán financiar, entre otras cosas, el más ambicioso programa de trasplantes renales en la historia del Instituto, nuevos programas de prevención e investigación en enfermedades crónico degenerativas, y el mayor plan de crecimiento de la infraestructura en cuatro años, que ya está en marcha: 14 hospitales y 29 unidades de medicina familiar en todo el país.
Con estas acciones se mejoran los servicios para elevar la calidad de vida de nuestros derechohabientes, se mantiene la transparencia en las compras de Gobierno y se genera un impacto positivo en las finanzas de la institución, garantizando su viabilidad en beneficio de todos los mexicanos.